Critica: Sanctorum
Sanctorum, del director Joshua Gil, es un film mexicano que nos lleva hasta el México más rural, en plena naturaleza, donde explora el drama de un pequeño pueblo donde sus habitantes se ven obligados a cultivar marihuana para poder sobrevivir, pero los hace estar siempre en peligro entre los narcos y el ejercito corrupto.
Sanctorum es un crudo relato de unos personajes abocados a la tragedia, que los ancianos ven anunciada en los extraños ruidos que se oyen desde la montaña a diario. Es un drama rodado de una manera muy natural, con largos planos estáticos y que en ocasiones puede dar la sensación de estar viendo un documental.
Joshua Gil consigue por un lado dotar de naturalidad al film y a sus personajes, y por otro lado, introducir el elemento místico que cada vez más va impregnando el relato, de esa naturaleza que ya no puede soportar más y se acaba rebelando contra todos.
Se trata de un film poco convencional, que funciona bien como drama de crítica a la situación de este pueblo, que lamentablemente debe ser algo bastante real, y que abraza el fantástico de una manera muy sutil, y cuyo aliciente es ver como al final nos va a mostrar, y de que manera, ese lado más espiritual y de venganza de la naturaleza, pero siguiendo en su propia linea, podemos decir que sabe realmente a poco.
Sanctorum forma parte de la sección online del Festival de cine Fantástico de Malaga que se puede ver hasta el jueves 19 en Filmin.
