Crítica: The Artifice Girl
Movistar Plus+ nos traía esta semana el thriller tecnológico The Artifice Girl, un film de ciencia ficción sobre Inteligencia Artificial que supone el debut en la dirección de Franklin Ritch, que además escribe el guion y protagoniza. Se trata de un pequeño film realizado en tres actos, con dos escenarios y cuatro protagonistas que a lo largo del tiempo nos muestra la evolución de una I.A. de una manera realista y sin efectismos ni giros gratuitos, y poniendo sobre la mesa el debate moral sobre la humanidad de esta tecnología y las repercusiones a largo plazo.
Todo empieza en un primer acto en una pequeña sala de interrogaciones, donde un par de agentes interrogan a lo que parece ser un sospechoso de pedofilia sobre su actividad en internet, pero la conversación acaba tomando un inesperado camino cuando se empieza a revelar el verdadero propósito del sospechoso. Y más vale que no cuente nada más, merece mucho la pena ir descubriendo por donde nos lleva la trama y sus distintos actos.
The Artifice Girl no tiene efectos especiales ni digitales, pero es mucho mejor que cualquier película de ciencia ficción que hayamos visto últimamente. Su trama se va desarrollando a base de diálogos y de hacer un exhaustivo análisis de lo que cabria esperar de la evolución de la I.A. y como afectaría eso al ser humano. Los actores cumplen bien su cometido, sobre todo con la presencia en el último acto de un Lance Henriksen que siempre impone. Pero quien destaca por encima del resto es la joven Tatum Matthews, que se come la pantalla cada vez que aparece con una actuación de lo más convincente. Hay un punto en la película en el que una revelación nos lleva a un cambio sutil en su actuación que está muy bien conseguido.
The Artifice Girl puede que sea una de las películas más coherentes y realistas sobre lo que puede llegar a significar la I.A. y hasta donde nos puede llevar su evolución, una película que ningún fan de la ciencia ficción debería perderse, otra pequeña joya realizada con poco presupuesto pero con mucho ingenio.
