Netflix no solo sabe hacer bien series sino que también es capaz de ofrecernos una decente película de ciencia ficción como es ARQ, que con una sencilla premisa y un escenario limitado, sabe construir un modesto thriller que te atrapa a partir de ir repitiendo el mismo día una y otra vez.
Ya hemos visto recientemente este mismo punto de partida, como en el día de la Marmota, en Al Filo del Mañana o en Código Fuente, estoy a la espera de ver un film alemán hungaro llamado Hurok con el mismo esquema, y la verdad es que la formula funciona la mar de bien. El escenario es un apartamento y nos encontramos en un futuro no muy lejano donde las corporaciones mandan a su antojo y el planeta se encuentra en grave estado, contaminado y con pocos recursos energéticos.
Renton es un ingeniero que se despierta junto a su chica y ve como de repente entran unos asaltantes a su hogar y le atan a una silla para robarle. Pero la secuencia se va repitiendo cada vez, y se van introduciendo nuevos giros a medida que Renton va conociendo los planes de los ladrones. ARQ introduce además una curiosa novedad a la trama que todavía la enriquece aun más y le aporta frescura y desde luego connotaciones argumentales interesantes, ya lo descubriréis.
El apartamento es escenario suficiente para que el guionista y director Tony Elliott, en lo que supone su film de debut, desarrolle una trama a partir de inesperados giros en cada repetición que el protagonista debe aprovechar a su favor para salir victorioso, además de una misteriosa máquina, la que da nombre a la película, que será pieza fundamentan en la historia.
Sus protagonistas son los televisivos Robbie Amell y Rachael Taylor, el primero es primo de Stephen Amell, el de Arrow, y aparte de que se parecen bastante, tienen el mismo nivel de interpretación, que viene siendo justito, y la segunda la hemos visto recientemente en Jessica Jones y mejora bastante el nivel de su compañero. De todas maneras, a una película de estas características tampoco le vamos a pedir actuaciones de Oscar, basta decir que son correctas y punto, no necesitamos mucho más.
ARQ resulta ser una grata sorpresa dentro de su limitado presupuesto y mercado, vuelve a demostrar que la premisa de repetir una y otra vez el mismo día sigue siendo válida y que suele resultar una buena herramienta para construir un buen thriller de ciencia ficción, por mí ya me pueden dar un par de películas así al año que no tengo ningún problema con ello.
4 comentarios
No ha estado mal y como bien dices la fórmula «Día de la Marmota» sigue funcionando perfectamente pero el protagonista comete demasiados errores (a pesar de tener tantos datos sobre lo que va a pasar) como para tomarla demasiado en serio.
Un par de detalles:
Si no me falla la memoria visual el protagonista es el que hacía de Fred en las dos últimas películas que ha sacado Warner de «Scobby Doo» (la versión adolescente)
Y el otro es que ¡SPOILER! desde que vi la manera patosa y de poner obstáculos que tenía la ***** ya veía venir la traición. La verdad es que el protagonista para ser un tipo tan inteligente y con recursos en cuanto a pagafantas se lleva el título de campeón mundial (por encima de Jorah Mormont de Juego de Tronos)
La verdad es que me hubiera gustado comentar el final pero sin poder taparlo con la ventana de spoiler prefiero no hacerlo para no fastidiar a nadie.
Un cordial saludo.
Pues si, Robbie Amell ha sido Fred en las versiones más recientes y televisivas de Scooby Doo.
SPOILERS!!!!!!!!!!!!!!!
Debemos entrar en el juego de que el cientifico que ha ideado una máquina capaz de generar energia constante e infinita es un tipo joven, guapo y cachas, una vez asimilado esto, el resto ya entra por si solo, jajaja.
A mi el final me gusta, creo que hubiera sido muy fácil optar por el típico final feliz y tal y como acaba resulta muy desesperante.
Saludos!!!
Hurok es húngara, no alemana
ok, es verdad, cambiado, gracias!!