Crítica: Pequeños Detalles
John Lee Hancock dirige este thriller policíaco ambientado a principios de los 90 del cual ha escrito también el guion y que nos presenta el típico caso de asesino en serie norteamericano que mata a jovencitas en Los Angeles. Protagonizada por Denzel Washington en la piel de un veterano sheriff que tiene que ir a la ciudad a recoger unas pruebas para un caso, y una vez allí, descubrimos que tiene un pasado relacionado con el cuerpo de Los Angeles que se nos irá rebelando poco a poco. El caso es que llevan dos meses detrás de un asesino en serie sin resultados, con lo que el detective de homicidios encargado del caso, que interpreta Rami Malek, decide aprovecharse de la experiencia del sheriff y pedirle ayuda.
Nos encontramos con una película que claramente se inspira visualmente y narrativamente en la hornada de thrillers de los años 90, con Seven al frente de todos ellos, no se si será casualidad que precisamente una de las últimas escenas de la película y además crucial, se desarrolla justamente en un páramo desértico en medio de la nada. Pero parece que Hancock tiene su propia idea sobre como desarrollar la trama y llevarla a un terreno diferente, en el que finalmente esclarecer el caso es lo de menos, y lo que le importa es la relación entre los dos personajes protagonistas y como se repiten los errores del pasado.
Lo que pasa, es que este giro de los acontecimientos no funciona. Igual les parecía una buena idea tirar por la borda toda la investigación y todo lo logrado hasta el momento para acabar con un final tan desafortunado e impreciso en el cual ya no importa quien es el culpable de los asesinatos ni como atraparlo, ya que lo que decide el guion es totalmente distinto a lo esperado, lo cual deja al espectador bastante descolocado.
Y uno de los problemas que tiene es el personaje de Jared Leto, que aunque realiza una buena actuación, no me lo acabo de creer, todo lo que hace me resulta falso e impostado, todo lo relacionado con él está muy forzado para llevarnos hasta el final que busca el director. Me pasa igual que ese pasado oscuro que no nos rebelan del personaje de Washington, que parece demasiado prefabricado, así como todo lo que lo relaciona con el caso con el que se obsesionó y le llevó a alejarse de la ciudad. Aunque durante un buen rato sabe llevar bastante bien el caso que les atañe y la investigación, llega un momento en que las decisiones de guion nos llevan por un camino por el que no consigo interesarme y no me convence.
Pequeños Detalles, al final lo de los pequeños detalles por mucho que lo vayan repitiendo todo el rato no acaba de resultar en nada concluyente ni esclarecedor, es un thriller que se queda a medio camino y que tiene la suerte de contar con unos actores de lo más solventes que al menos defienden como pueden unos personajes que son demasiado obvios en el caso de los detectives y demasiado indefinidos en el caso de Leto.
